“La gestión de las editoriales universitarias y la transferencia estratégica de conocimiento en Panamá”, fue el tema que presentó la Ing. Libia Batista, jefa de la Editorial Universitaria de la Universidad Tecnológica de Panamá (UTP), en el marco de la versión digital de la Feria Internacional del Libro 2020.

En esta disertación compartió los resultados de su investigación doctoral, que responde a las preguntas ¿Qué están haciendo las editoriales de las universidades públicas panameñas para estar al nivel de los estándares de las principales editoriales de Latinoamérica? y ¿Cuál ha sido el impacto de los productos generados por la gestión de las editoriales en el país?

Resaltó la Ingeniera dos palabras: gestión y conocimiento. Añadiendo que lo que no se mide, no se gestiona y lo que no se disemina es como que no existiera. En base a ello, destaca que la investigación refleja falencias en la gestión y transferencia del conocimiento de las editoriales universitarias en Panamá. Manifiesta que todas son superables una vez se reconozca la importancia de las editoriales en el cumplimiento de la misión de las universidades hacia la sociedad y se miren a estas no como el espacio de una imprenta, o como una librería, pues son las editoriales universitarias las que proveen la materia prima.

Entre otros hallazgos, la expositora indicó que en las universidades existe interés por hacer visible las revistas científicas a través de los repositorios, pero se deja a un lado el conocimiento vertido en los libros.

Finalmente, cumpliendo con los objetivos fijados en la investigación, la Ing. Batista presentó el modelo de gestión para las editoriales universitarias en Panamá e indicó que es aplicable en toda editorial universitaria, con el objetivo de hacerla competitiva.

Una vez presentada la investigación, la Dra. Libia Batista compartió espacio con el Dr. Dagoberto Arias, actual Coordinador del Sistema Editorial de Universidades de Centroamérica (SEDUCA) y Director de la Editorial del Tecnológico de Costa Rica.

El Dr. Arias describió como buenas prácticas desde la gestión de las editoriales de las cinco universitarias públicas de su país, entre otras, la participación a nivel nacional y regional en redes universitarias y el apoyo de las autoridades universitarias.

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